Esta semana es para mí , una de las peores semanas deportivamente hablando, y es mala porque la deportividad, precisamente, se deja de lado
por algunos, para olvidarse que esto no es nada más que un partido de liga más.
Y no me refiero a esos que son tontos desde que sus abuelos eran novios, esos que los hay en todos los lados y no usan el fútbol nada más que
como una excusa para sacar a flote sus frustraciones.
Me refiero a gente normal, al menos en apariencia, que parece que necesitan odiar a alguien para reafirmar el amor por su
equipo.